El reino del revés

Duró poco Román. Salió lesionado en el PT.

No se si hace falta aclararlo pero hoy ganó River en La Plata por 2 a 1 ante Estudiantes. A partir de allí evaluamos los aspectos de esta victoria de la Gallardeta:

• Hoy se dio la lógica, aunque a muchos les cueste admitirlo. Ganó un equipo que lleva 29 partidos invicto. Es innegable que para poder alardear de semejante racha hace falta jugar bien, ser sólido, eficaz, tener suerte y temperamento.
• Estudiantes, por su parte, mostró por qué es un equipo copero. Impuso al rival su forma, su estilo, su ritmo y lo arrolló en el primer tiempo. Además la hinchada también jugó: presionaron a Barovero en todo momento luego de la polémica con Román Martínez, y también al árbitro, sin darle márgen de error.
• La llave quedó abierta, aunque hay quienes ya se animan a dar por muerto a Estudiantes.

El partido de hoy no fue tan lógico como lo marca el resultado. River no jugó bien, aún mejorando en el segundo tiempo. Estudiantes hizo el partido perfecto durante el primer tiempo y se quedó en el segundo.

 Ahora el problema es justamente ese. ¿Cómo River mejora en el segundo tiempo y Estudiantes baja su rendimiento?

 Estudiantes de La Plata y River Plate fueron hasta hace unas semanas los únicos con triple competencia en el semestre argentino. Casi al mismo tiempo quedaron afuera de la Copa Argentina, pero River se mantenía puntero del torneo local, y aún lo hace.

 En cambio en Estudiantes se tomo la decisión rápida de jugársela por la Sudamericana. Pellegrino puso mayoría de suplentes en todos los partidos del torneo local desde aquel partido ante Huracán por Copa Argentina. Les dio a sus dirigidos el descanso necesario para afrontar la competencia más importante.

 Entonces: ¿cómo puede ser que hoy el equipo que resignó el torneo para sumar energías para la copa se quedó sin nafta en un segundo tiempo donde, el que viene cansado jugando doble competencia, casi sin descanso, subió su nivel y hasta superó al local? Y además ¿Cómo River viene de tanto trajín cansador con varios partidos donde tuvo que esforzarse al máximo para ganar, incluso debiendo dar vuelta resultados, tuvo semejante reacción?

  

 Todavía no encuentro explicación que me satisfaga. Por el lado de River, entiendo que la mentalidad que Gallardo impuso a sus jugadores mantiene frescas sus cabezas, lo cual influye en las piernas. Pero del lado de Estudiantes no puedo comprender por qué no pudo someter a River y desgastarlo para superarlo físicamente.

 Quizás el gol de Mora al principio del segundo tiempo haya sido un martillazo para el León. Pero no es casualidad que River de vuelta partidos, ya lo hizo infinidad de veces. Estudiantes sabía esto. Pellegrino no es obtuso. ¿Cómo entonces no se pudo preveer que River en el segundo tiempo iba a salir a ganar?

 Con el diario del lunes todos somos expertos, claro. Y la estrategia adoptada durante los 90 minutos nunca van a ser tan acertadas como las que reclamamos post partido. Y ahí entramos en el terreno de lo improbable. Puedo ahora mismo ganar el partido de distintas formas:

• Meter a Cerutti por Vera, sumarle velocidad al ataque de Estudiantes para buscar rápidamente el segundo gol y cerrar el partido, o;
• Meter otro defensor, formar una línea de 5 con Damonte y Gil Romero delante, Auzqui y Correa por las bandas y Carrillo de 9, o;
• Con un refuerzo en el mediocampo (el Chino Benitez) para superar al rival allí y manejar la pelota, impidiéndole usarla como arma.

Todo esto ganaría el partido. O no. Esa es la magia de hablar después. Hoy escuché varios técnicos llamando a radio La Redonda post partido explicándole a Pellegrino cómo debía afrontrar el segundo tiempo. "Tantos DTs llamando a la radio, tan sabios y sin laburo", pensé yo. 

El segundo tiempo fue de River.

 Pellegrino tuvo una idea y la llevó a cabo. Estudiantes cae en un pozo cuando Correa y Carrillo no pueden aguantar el rendimiento. El Tucu no apareció en el complemento, pero en el primer tiempo fue apabullante, bailó a toda la defensa millonaria. Carrillo tampoco tuvo muchas intervenciones en esa fatídica segunda parte, pero en la primera fue fundamental cada vez que colaboró con los mediocampistas.

 Lo único, tal vez, reprochable del Director Técnico pincharrata fue el cambio de Cerutti por Auzqui. Si Carlitos había ingresado tras la lesión de Román, y pensando en el cansancio, ¿era el que debía salir? Si ya dijimos que Correa no puede aguantar el buen nivel los 90 minutos, ¿no debía salir él? En fin, siguen siendo supuestos.

 Las Polémicas: 

• Penal para Estudiantes: pisotón de Barovero a Román Martínez. Es muy fino. Si bien Román tuvo que salir a causa de ese pisotón, en la cancha, justo desde la popular, el mejor lugar para verlo, no se ve tan claro y en la televisión perdurará la duda de si Barovero llegó o no primero a tocar la pelota.
• Penal para River: y expulsión de Sanchez. Entró al area chica, luego de una muy linda jugada grupal y cae luego de una pierna cruzada por el Chino Benitez, que jura (en La Redonda, al menos) no haberlo tocado. En la cancha no se ve un claro penal, y en la TV tampoco han dicho que lo haya sido. La diferencia es que desde la tribuna se ve a Sanchez intentando justificar la caída y en la televisión aseguran que no simuló. Pero el árbitro decidió y por lógica, tuvo que expulsarlo.

Estudiantes:

 Gran primer tiempo. No se la dejó tocar al rival. El equipo asumió la responsabilidad de manejar el partido y la pelota, Tuvo chances claras, no sufrió en defensa y se fue al entretiempo ganando el partido. 

 En el segundo tiempo todo lo contrario, Arrancó cediendo la pelota y rápidamente le empataron el partido, y fue perdiendo peso ofensivo hasta que ingresó Cerutti, casi sobre el final, y le dio otro aire al equipo. El pocho contó con tres o cuatro contragolpes que terminaron en centros, uno de ellos terminó en córner y otro en una increíble tapada salvadora de Barovero ante un cabezazo certero de Carrillo.

 Terminó apretando al rival, pero solo tuvo un par de llegadas claras en ese segundo tiempo, una de ellas el mencionado cabezazo del capitán Guido.

 River:

 Flojo en el primer tiempo, aunque puede ser más por mérito del rival que por falencias propias. Porque el equipo intentó atacar, movió la pelota cuando pudo tenerla, contó con la paciencia de siempre, pero nunca pudo superar la presión de Estudiantes. Fueron bien marcados sus receptores siempre. Pisculichi fue una sombra, aplastado por el doble cinco áspero que puso el Pincha (Damonte y Gil Romero).

 En el segundo tiempo, Gallardo tomó nota, puso a Pisculichi de wing derecho (textual explicación de Pellegrino post partido) y con más espacios comenzaron a dominar el partido. No llegaron tan claramente como en otros partidos, pero aprovecharon las que tuvieron. Un centro muy preciso que encontró a Mora, solo en el área chica que cabeceó perfecto. 

 Luego un disparo de Pisculichi que se fue cerca.  Otro de Teo que atajó muy bien Hilario Navarro, y posteriormente un centro que parecía no tener buen final, pero Schunke metió la cabeza, desvió el disparo y dejó sin chances a su compañero correntino. Nada de culpa de Hilario, tampoco de Schunke si te ponés a pensar, porque nunca vio si atrás había peligro. Gol en contra, suerte de campeón.

 Abal: 

 No me gustó, pero por el solo hecho de que no me gustan los arbitrajes. En el primer tiempo dejó pegar, en el segundo amonestó todo lo que vio. No influyó demasiado en el partido, pero se le fue de las manos por momentos las protestas, más de River que de Estudiantes, pero de los dos en general.

 La revancha se viene por dos: los suplentes tendrán revancha mutua (tal vez) el Domingo por la noche, 21:30 horas en el Monumental, por el torneo local, Y el jueves 6 será el segundo "chico" de los Cuartos de Final, También en Nuñez, y yo personalmente estimo que va a ser un partido con tantas emociones como el de hoy.